Los Heladitos nació con una idea sencilla: hacer helados como los de antes, con ingredientes de verdad, sin atajos, sin prisa, y con el cariño que solo una cocina familiar puede ofrecer. Comenzamos desde lo más pequeño: una receta casera, una hielera compartida, y muchas ganas de ver sonreír a quienes probaban nuestros primeros sabores. Lo que inició como una pasión entre familia, fue creciendo poco a poco gracias a quienes creyeron en nosotros desde el primer día.
Durante los primeros años, fuimos perfeccionando nuestras recetas, cuidando cada detalle y escuchando con atención a cada persona que se acercaba a probar un helado. Aprendimos a valorar los pequeños lotes, la fruta fresca, el sabor honesto. No usamos químicos ni saborizantes artificiales, y cada sabor que ofrecemos es el resultado de pruebas, errores, risas, anécdotas y mucho trabajo en equipo. Somos una empresa familiar no solo en estructura, sino también en espíritu: cada helado lleva parte de nuestra historia.
Hoy, con más de 20 sabores entre opciones en agua y leche, estamos viviendo una nueva etapa: bajo una administración renovada, con visión fresca y profesional, pero con el mismo compromiso artesanal de siempre. A mediano plazo queremos fortalecer nuestra presencia en tiendas, ferias, restaurantes y plataformas digitales para que más personas conozcan el valor de un producto hecho con amor. También buscamos invertir en maquinaria responsable y sostenible, sin perder ese toque hecho a mano que nos hace únicos.
Nuestro sueño a largo plazo es convertirnos en una marca nacional reconocida por su autenticidad y calidad, sin dejar de ser fieles a nuestras raíces familiares. Queremos abrir puntos de venta propios, expandir nuestra línea de productos, y generar empleo para más personas que compartan esta pasión. Pero sobre todo, queremos seguir acompañando momentos felices, grandes y pequeños, con algo tan simple y poderoso como un buen helado.
Gracias por ser parte de este camino. Lo estamos construyendo juntos, paso a paso… cucharada a cucharada.
